Más

    Paso a paso, cómo preparar la moto para el verano y viajar seguros en la ruta

    Una revisión exhaustiva de la moto antes de partir no solo previene inconvenientes mecánicos en el camino, sino que constituye un pilar fundamental de la seguridad vial.

    Con la llegada de las vacaciones de verano, miles de motociclistas se preparan para emprender viajes en ruta y disfrutar de la libertad que ofrecen las dos ruedas. Sin embargo, las altas temperaturas y las largas distancias pueden presentar desafíos que requieren una preparación adecuada tanto del vehículo como del conductor.

    Desde la Comisión de Seguridad Vial de CAFAM (Cámara de Fabricantes de Motovehículos), recomiendan recordar las siguientes siglas, para que el chequeo sea completo: TCLOCK, que significa: Neumáticos (Tires), Controles (Control), Luces (Ligths), Aceite (Oil), Cadena (chain) y Soportes (Kickstand).

    T – Neumáticos y presión

    • Verificar la profundidad de la banda de rodadura y el desgaste en la rueda.
    • Buscar objetos incrustados y protuberancias.
    • Verificar la presión de aire con los neumáticos en frío (en el cubre cadena se encuentra el sticker con la indicación de la presión según el tipo de moto.
    • Que las llantas no estén deformadas.

    C – Controles

    • Controlar nivel de líquido y pastillas de freno.
    • Asegurarse que cada freno individualmente pueda evitar que su moto se mueva.
    • Comprobar que los cables no estén desgastados ni doblados ni hagan interferencia
    • Revisar las mangueras para detectar grietas, fugas y protuberancias.
    • El acelerador debe moverse libremente sin acelerar cuando se gira el manillar.

    L – Luces y electricidad

    • Comprobar que todas las luces se enciendan y las señales de giro funcionen.
    • Asegurarse que los terminales de la batería estén limpios, ajustados y 
    • bien sujetos.
    • Comprobar que el tubo de ventilación no esté doblado.
    • Asegurarse de poder orientar la altura del faro y hacia la izquierda/derecha.
    • Verificar que todos los interruptores estén operativos.
    • Ajustar todos los espejos, sentado, para verificar el campo de visión.

    O – Aceite y otros fluidos

    • Revisar el aceite con la moto fría, en una superficie nivelada para asegurarse una lectura de nivel adecuada.
    • Verificar si hay filtraciones, cambiarlo de acuerdo al manual del propietario.
    • Revisar el filtro de aire en el caso de circular por calles de tierra.

    C – Cadena

    • Compruebe la tensión de la cadena según el manual del propietario.
    • Limpie y engrase la cadena con aceite de transmisión.
    • Visualice las condiciones de la corona y el piñón (dientes rotos o destruídos).

    K- Soportes

    • Revisar el caballete central y lateral para que no tenga grietas o dobleces.
    • Asegurarse que los resortes del caballete central estén en su lugar y tengan tensión para mantener la posición.
    • Asegurarse que el caballete lateral permanezca en su lugar y mantenga la posición de la moto.
    • Comprobar que la almohadilla del soporte esté presente y sin daños.

    Más allá de la preparación mecánica, la cual es recomendable realizar en cualquier concesionario oficial, CAFAM alerta sobre la conducción en verano ya que presenta desafíos relacionados con las altas temperaturas:

    • Evitar circular en las horas de máximo calor, generalmente entre el mediodía y las cuatro de la tarde. El equipamiento de protección no debe sacrificarse por el calor. Actualmente existe en el mercado una amplia variedad de chaquetas, pantalones y guantes diseñados específicamente para el verano, fabricados con materiales ventilados y tejidos técnicos que permiten la circulación del aire sin comprometer la protección en caso de caída.
    • Usar casco homologado, correctamente abrochado, es obligatorio; representa el elemento más importante del equipo de protección.
    • La distribución del equipaje debe ser equilibrada entre los bultos laterales y el baúl trasero para no afectar la estabilidad, especialmente en curvas y maniobras. Todos los bultos deben estar firmemente sujetas, ya que en viajes largos tienden a moverse y pueden desplazarse si no están bien aseguradas.
    • Se recomienda realizar paradas cada dos horas o cada 150 kilómetros, tal como recomienda la Dirección General de Tráfico. Estos descansos permiten estirar las piernas, hidratarse adecuadamente y recuperar la concentración.
    • Llevar un kit básico de reparación.
    • No olvidarse la documentación obligatoria: licencia de conducir, el documento nacional de identidad, cédula y el seguro del vehículo, que deben estar en vigencia.

    Artículos relacionados

    Compartir en redes

    Otros artículos