La firma coreana publicó más detalles de los materiales que aplicó en sus últimos dos prototipos, el EV3 y el EV4. Micelio, cáñamo y mucho más.
La búsqueda es incesante, cada paso intenta elevar aún más la vara y achicar el impacto contaminante en el medio ambiente. No sólo por los materiales en sí, sino por los procesos de fabricación de los mismos. La industria del automóvil, en su mayoría, está hoy pensando en cómo hacer para que toda la cadena de valor o de suministros involucrada en la fabricación de un vehículo produzca el menor daño posible en la naturaleza.
Kia dio una señal fuerte en los últimos tiempos, de la mano de los concepts EV3 y EV4 que, además de sus motorizaciones eléctricas y soluciones de diseño, presenta una amplia propuesta respecto a materiales de origen natural aplicados a diferentes partes de estos vehículos.
¿Hongos? ¿Raíces? ¿Cáscaras de nuez? Sí, todo eso y más. Kia sostiene que al crear el interior del EV3, el equipo de diseño CMF (color, materiales y acabado) se inspiró en el aire como elemento de la naturaleza, con un uso óptimo de la luz y la transparencia en todo el habitáculo. Al igual que en el Concept EV4, también utilizó una serie de innovadores materiales sostenibles.
Estos materiales reducen el impacto medioambiental de los vehículos, proporcionan una mayor libertad de diseño y permiten márgenes de elección sin precedentes en colores y acabados.
El equipo CMF de Kia utilizó estructuras de fibra natural en el Concept EV3, en lugar de fibra de carbono, con el objetivo de que el asiento sea más liviano y estilizado. El tejido de fibra sostenible, excepcionalmente resistente, se distingue por una estética más elegante y moderna, complementada con suaves tonos naturales.
Para la tapicería de los asientos el equipo aplicó la tecnología 3D Knit. Por una parte, este proceso da como resultado un efecto 3D visualmente impresionante, con una superficie muy suave. Por otra, posee una eficiencia líder en su clase debido a la reducción de costuras y uniones, además de no generar residuos de material.
El producto elegido por Kia para el interior de la consola del Concept EV3 no se fabrica, sino que se cultiva. Marília Biill, Directora de Diseño CMF de Kia, explica: «El micelio, que procede de las raíces de los hongos, combina una excelente resistencia con una superficie extremadamente suave. El desarrollo de materiales cultivados, un proceso denominado biofabricación, es uno de los principales objetivos para Kia».
«Utilizar micelio nos permite imitar los procesos que vemos en la naturaleza y aprovecharlos para diseñar soluciones más sostenibles. Con este material cultivado en un molde se puede obtener cualquier forma que se desee. El uso de micelio está aún en una fase muy temprana y, como parte de la estrategia de sostenibilidad de Kia, estamos trabajando con socios para acelerar su desarrollo. Algún día, cultivando nuestros propios materiales, podremos simplificar los procesos, adaptar las formas y, lo que es más importante, estar más cerca de la naturaleza en su esencia», detalla Biill.
Para crear el habitáculo del Concept EV4, el equipo de Kia CMF se inspiró en otro elemento de la naturaleza: la tierra. Sobre algodón 100 % reciclado se aplicaron tintes naturales elaborados con raíces de una planta llamada rubia y cáscaras de nuez. Con ellos, el equipo tiene a su disposición una gama casi infinita de tonalidades y matices, cortesía de la naturaleza.
Decidida a dotar al habitáculo del Concept EV4 de un ambiente de pura singularidad y calidad excepcional, Kia tejió a mano franjas de tela para aplicarlas al tablero y a la zona del baúl.
Los diseñadores de Kia recurrieron a las fibras de cáñamo para realzar el atractivo estético y la funcionalidad de la consola del Concept EV4. «El cáñamo es una planta de crecimiento rápido que requiere recursos mínimos para su cultivo», cuenta Biill. «No sólo es muy sostenible, también muy moldeable. Por tanto, resulta un material muy versátil para trabajarlo. Además, con su hermoso y rico color, mejora el interior de este prototipo eléctrico», sostiene.
Muchos de los materiales y metodologías utilizados en los prototipos EV3 y EV4 muestran soluciones que Kia está investigando para implementar a escala en el futuro. La marca tiene un largo historial de integración de materiales sostenibles en sus productos, empezando por el uso de bioplástico y biofibra de caña de azúcar en el Soul EV de 2014.
A principios de este año, con el lanzamiento del SUV eléctrico insignia EV9, en marzo, Kia intensificó aún más su compromiso de minimizar el impacto en el medioambiente de la producción de vehículos al introducir diez elementos de sostenibilidad imprescindibles para todas las nuevas gamas de Kia.
Entre esos diez componentes figura el bioplástico. Producido a partir de fuentes de biomasa, como aceites vegetales, extracto de maíz, aserrín y caña de azúcar, el bioplástico se aplica a componentes como planchas frontales, tableros, consolas, pilares y molduras.
Kia identificó el biopoliuretano (PU) como un sustituto óptimo del cuero, ya que está hecho con componentes de origen vegetal y proporciona un soporte, una amortiguación y una durabilidad ejemplares. Las alfombras de los vehículos pueden fabricarse con un 100 % de PET (plástico reciclado) y Kia ofrece la opción de que una parte de este material proceda de redes de pesca recuperadas.